Un estudio científico en Estados Unidos midió el comportamiento de las pupilas determinando patrones similares en grupos de diferentes orientaciones sexuales. Por lo que las pupilas se comportan diferente si la persona es homosexual, bisexual o heterosexual.
Atracción sexual
El estudio analizó a 160 mujeres y 165 hombres. A cada voluntario se le mostraron dos videos de 30 segundos cada uno. Los videos mostraban cada uno a un hombre y a una mujer, ambos atractivos masturbándose. Estos videos se mostraban intercalados con imágenes de paisajes, neutras ordenadas de forma aleatoria. Mientras se mostraban los videos se medían las reacciones de las pupilas ante los estímulos sexuales.
Como resultado, la orientación sexual declarada por los voluntarios correspondió a las conclusiones de los científicos sobre la dilatación de las pupilas. La hipótesis sostiene que mientras más se dilaten las pupilas más atracción sexual se demuestra frente a la excitación.
Se descubrió que los hombres heterosexuales muestran una dilatación más fuerte como reacción ante la imágen femenina. Mientras que las mujeres y bisexuales tienen la misma respuesta en sus ojos ante los dos videos. Sus pupilas se dilatan casi igual al ver tanto al hombre como a la mujer masturbándose. Con respecto a esto los investigadores sostienen que al no haber diferencia entre las reacciones ante los videos se sostiene un deseo sexual flexible.
Con respecto a las mujeres homosexuales se comportaron muy similar a los hombres heterosexuales, solo se le dilataron las pupilas al ver el video femenino, este estudio demuestra que las lesbianas en promedio tienen conceptos sexuales muy similares a los masculinos.
No es la primera vez que se realiza un estudio de inclinación sexual en individuos a través de la reacción de las pupilas. En el año 1950 el gobierno de Canadá identificaba homosexuales a través de la reacción del iris cuando los consideraban una amenaza para la seguridad nacional en plena fiebre homofóbica. Sin embargo los resultados de todos esos estudios realizados en el pasado, son hoy dejados de lado ya que hay muchas variables que no fueron estandarizadas para tener rigor científico. El brillo de las imágenes, la distancia entre la cámara y el ojo, y demás mediciones afectaban el tamaño de la pupila porque no eran constantes, lo que deja mucho margen de error y pierde efecto el estudio.
Este nuevo estudio, muy lejos del caso de Canadá, apunta a entender mejor la función biológica de la exitación, ya que a los hombres les facilita la erección y la penetración y para las mujeres ayuda a la lubricación para evitar lesiones genitales.
Gracias a las nuevas tecnologías dos investigadores del Departamento de Desarrollo Humano de la Universidad Cornell, New York, Rieger y Savi-Williams con un dispositivo infrarrojo que puede medir de forma exacta y en píxeles el tamaño y grado de dilatación de la pupila. Ellos hicieron el estudio a 325 personas, se toma esta medida ya que no puede ser controlada de forma consciente por los voluntarios.
fuente/educasexo
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